No es necesario presentar a Jean-Baptiste Botul, ficticio pero célebre filósofo «de tradición oral», sobre todo desde la célebre metedura de pata de Bernard-Henri Lévy en 2010, mencionada en este nuevo libro, que lo hizo más famoso aún. Este pequeño libro se inscribe en la misma línea que las otras obras de Botul (La Vie sexuelle d’Emmanuel Kant (1999), Landru, précurseur du féminisme (2001)...); pero esta vez, viene firmado por Frédéric Pagès. Se trata de la transcripción de una conferencia que dio Pagès en el Salón Botul el 21 de marzo de 2013, a raíz del análisis de las cajas de archivos descubiertas en Lairière, el municipio de nacimiento del filósofo, y que le permitieron reconstruir, encajando los distintos testimonios unos con otros, el oscuro caso de Carcassonne. En junio de 1928, Botul, efímero profesor de filosofía, llevó a sus alumnos a un burdel llamado Mi Capricho, pero no para divertirse sino con vistas a una verdadera iniciación, que enlaza con la gran tradición de los antiguos banquetes y suscita cuestiones filosóficas sobre la educación, la virilidad y la Republica francesa.

Las obras de Jean-Baptiste Botul son conocidas y esperadas: De La Vie sexuelle d’Emmanuel Kant (1999) (La vida sexual de Emmanuel Kant) y Nietzsche et le démon de midi (2004) (Nietzsche y la crisis de los cincuenta) se vendieron unos 10000 ejemplares. En este caso, la fama de Frédéric Pagès se añade a la del personaje que creó, Jean-Baptitste Botul. El formato pequeño y el precio pequeño, en la línea de los primeros Botul, convencerán a un público ya fiel a las obras de un filósofo que Bernard-Henri Lévy ha hecho mucho más famoso.