Cent sept ans
Marie-Aimée Lebreton
De su infancia, Nine no sabe nada más: nada salvo el encuentro de sus padres en Argelia, su amor demasiado breve, que su padre fue abatido en la guerra y su corazón depositado en una cabaña de madera. La señora Plume, su madre, no habla de este pasado, de su país, de sus recuerdos. Un día, pese a los ruegos de Fatma la dulce, huyó de su pueblo de Cabilia y se llevó a su pequeña a una ciudad del norte de Francia donde vivieron muy unidas. Empezaron entonces una nueva vida errante, recordando el desierto bajo un cielo aplastante. Nine crece pegada a su madre, con una sed de conocimiento, de comprensión y de libertad que pasará por el aprendizaje del piano, del lenguaje, y también por el regreso a Cabilia, la tierra de sus orígenes.
Esta breve novela sobre el exilio aúna el ritmo y la poesía de los cuentos para evocar la búsqueda identitaria de una niña obnubilada por su silencioso pasado.
Una primera novela nítidamente poética que evoca con palabras muy dulces la historia de una niña sin padre, la historia de un desarraigo y un exilio, la historia de unas mujeres cuyas vidas la guerra desquició.