Notre santé et la biodiversité
Tous ensemble pour préserver le vivantGilles Pipien, Serge Morand
Hoy en día, a menudo ignoramos que nuestra salud depende también de la preservación de la biodiversidad. Solemos asociar la fauna salvaje con enfermedades como el chikungunya, el paludismo o la gripe aviar. Y se nos amenaza con el espectro de enfermedades emergentes o importadas. Sin embargo, las investigaciones científicas demuestran que, al destruir los ecosistemas, al perturbar el funcionamento de la naturaleza, nos ponemos a nosotros mismos en peligro.
• Porque la biodiversidad conlleva ciertamente un riesgo, pero es también una garantía para nuestra salud (biodiversidad y enfermedades infecciosas).
• Porque el control de la naturaleza puede ser perjudicial para la salud (resistencia a los antibióticos, a los insecticidas).
• Porque contaminar el medio ambiente es perjudicial para la biodiversidad y la salud (problema del desecho de medicamentos en el medio ambiente, y de los perturbadores endocrinos).
• Porque la biodiversidad cura (el rol terapéutico de las plantas).
Este libro contiene veinte colaboraciones, entre las que figuran tres entrevistas con : Patrice Debré (profesor de inmunología, ex embajador para la Salud y las enfermedades infecciosas), Robert Barbault (director en el Museo Nacional de Historia Natural de París) y Virginie Marris (filósofa en el CNRS, Centro Nacional de Investigación Científica de Francia). Y concluye con el llamamiento urgente a unas políticas públicas adecuadas.
Existe una relación estrecha entre la salud humana y la biodiversidad: cuando el hombre perturba el funcionamiento de la naturaleza se pone en peligro a sí mismo. Por el contrario, si llevamos una vida más próxima a la naturaleza y la explotamos de manera respetuosa, contribuímos a preservar nuestra salud.