El liberalismo tiende a imponer una hegemonía intelectual, con el fin de minar toda alternativa al capitalismo. Sin embargo, éste último está indiscutiblemente en crisis. Si queremos poner fin a la explotación económica, a la dominación política y la alienación, tanto colectiva como individual, ¿el comunismo no es acaso la solución? ¿Pero de qué comunismo hablamos?
El retorno a Marx no es un retorno al sistema soviético, que fracasó estrepitosamente al despreciar la democracia, tan fundamental. Se trataría más bien de reactivar el proyecto comunista tal y como Marx lo concebía, en un contexto de capitalismo desarrollado. Porque esa transición solo es posible partiendo de las condiciones creadas por un capitalismo llegado a su apogeo. De manera que el comunismo no ha fracasado, porque en realidad no ha llegado a existir nunca en el siglo XX. La reflexión de Yvon Quiniou está encaminada a rehabilitar el proyecto marxista del comunismo, que es ante todo un proyecto profundamente humanista, algo de lo que carece por completo tanta falta el capitalismo financiero.
La historia no ha dado traspiés. El futuro queda abierto.

Ensayo político claramente comprometido a favor del comunismo concebido por Marx, pero rigurosamente argumentado desde el punto de vista teórico, este libro es también una apasionada incursión en el debate ideológico actual que defiende el proyecto comunista como hasta ahora nunca se había hecho. Demuestra por qué es un proyecto moderno y por qué puede ser una alternativa creíble al capitalismo financiero que puede acabar arrastrándonos, crisis tras crisis, al peor de los sistemas.